De “patrimonio” y “patrimonios”

(En Familia Nº 17, setiembre 2003 )

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El día del patrimonio se ha incorporado con sorprendente rapidez a la vida de los uruguayos.
Año a año gana nuevos adeptos y la imaginación para mostrar algo de lo nuestro, espolea la creatividad de las personas y las organizaciones para sorprendernos con originales realizaciones.
De un concepto del patrimonio, entendido éste como algo estático inerte y ligado al pasado, centrado en visitas a edificios o monumentos antiguos, pasamos al concepto dinámico de patrimonio considerado como todo lo del ayer que contribuye en mayor o menor grado a darle sentido al hoy de nuestra cultura.
Así lo destaca la convocatoria al día del patrimonio que ya no es uno, sino que son dos: 20 y 21 de setiembre: “En esta celebración se conjugan todas las expresiones culturales de nuestro medio en jornadas participativas y dinámicas”. No son sólo visitas a museos y monumentos históricos, edificios relevantes o centros de interés sino que hay lugar para espectáculos vinculados a nuestra tradición, gastronomía nacional, juegos u oficios del hoy y del ayer, conmemoraciones históricas, canto y danza, música y teatro.
La 9ª edición del día del patrimonio es una invitación a prestar atención a todo aquello que podemos considerar como nuestras raíces, no sólo como nación, sino también y sobre todo, como institución, como Colegio, como familia, como personas. Reconocer, identificar, descubrir y valorar hechos, acontecimientos y personas significativas en nuestra historia personal, familiar o institucional puede ser una buena manera de darle contenido vital al día que, está claro, no ha de entenderse unívocamente porque es imposible hablar del “día del patrimonio” sin hablar de “patrimonios”, tantos como organizaciones, familias y personas integran la comunidad nacional que es nuestro país.