La primera semana de marzo, el silencio de los salones, patios y corredores se tornó en algarabía y bullicio. Comenzaron las clases. Desde Educación Inicial a Bachillerato, niños, niñas y jóvenes se reencontraron con sus amigos y se hicieron de nuevos compañeros con quienes caminarán juntos en la maravillosa tarea de crecer. La Sagrada Familia los recibe con los brazos abiertos ¡Bienvenidos!